El pasado fin de semana la primera candidata a concejal por el Frente de Izquierda en Quilmes, Carla Lacorte, estuvo con el candidato a diputado nacional Nicolás del Caño recorriendo la feria de San Francisco Solano. Con orgullo cuenta a CPB Noticias que la presentación oficial de la lista tuvieron que postergarla porque iba a ser el mismo día que el Gobierno ordenó la represión a trabajadores de PEPSICO, y se acercaron al lugar.
“Nosotros acá vemos muy probable que podamos acceder a ingresar un concejal”, señala Lacorte. “Vemos la realidad de Quilmes muy distinta a cómo es a nivel oficial y en general del país. El nivel de desocupación es muy similar al resto y acá en particular Martiniano Molina comenzó su gestión hace un año y medio dejando miles de municipales en la calle. Después avaló o no hizo absolutamente nada con los despidos que hubo en importantes fábricas de la zona. Lo único que hemos visto en estos últimos tiempos para enfrentar este nivel de desempleo es una feria de empleo como la ‘Soy Joven’, en La Bernalesa, y la única salida era enseñarles a los jóvenes a aprender a hacer curriculums. Una cosa ridícula e incluso ofensiva. Porque el nivel de desocupación del 11,8% en la juventud se duplica. Por eso, ante esto, desde el Frente de Izquierda nosotros proponemos la reducción de la jornada laboral a 6 hs., 5 días a la semana, con un salario que cubra como mínimo la canasta familiar para que todos puedan trabajar.”
Sobre el posible rol del FIT en el Concejo Deliberante local, Lacorte señaló «podemos aportar mucho. Vamos a llevar la pelea que damos todos los días en todos los lugares de estudio y de trabajo. Nosotros no militamos sólo en períodos electorales, nosotros militamos y damos pelea todos los días. Como lo han visto acompañando a los compañeros trabajadores de las fábricas. En Quilmes, en la lista, tenemos trabajadores de la educación, de la salud.”
Sobre la gestión actual, Lacorte señaló: «vemos que en Quilmes se están haciendo obras como el bajovías o bacheo, pero está completamente relegado el déficit habitacional que hay en el municipio, el 20% de la población vive en villas y asentamientos. Creemos que hay que discutir un plan de viviendas y obras públicas pero siendo discutido, decidido y controlado por las organizaciones obreras y vecinales para que esto no termine en dinero que va a obras que no necesita como salida la población y que además terminan en negociados.” Además aseveró que “este gobierno que hoy se presenta como un cambio, apenas asumió Molina se subió su salario como Intendente. Es vergonzoso lo que cobra. Nada más alejado de la realidad del quilmeño común que tiene que trabajar para poder llegar a la canasta familiar.”