Despenalización del aborto: “Sí se puede”

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Pintura de Beatriz Bekerman. Artista plástica argentina. “Muchas mujeres probablemente todas repletas de agujeros”
*Por Elizabeth Barbis*

El 99 % de las muertes maternas, ocurren en los países en subdesarrollo y solo el 1%, ocurren en Europa, Norteamérica, Australia y Nueva Zelanda.

El imaginario social occidental  de anteponer  -por tradición religiosa- la condición de madre a cualquier otra con la que pudiera caracterizarse, define posiciones sobre la temática.

La interrupción voluntaria del embarazo ha ocurrido en todas las culturas y en todas las épocas y todas las mujeres que, bien o mal, resuelven su problema (interrupción voluntaria de su embarazo) en el hogar o en la comunidad,  fuera de los hospitales, no son registradas en estadísticas oficiales y conocer el número de muertes que ocurren en América Latina por aborto, impera como  necesidad para analizar y abordar un política pública.

La  información disponible y segura, como el número de hospitalizaciones por  aborto en las Instituciones oficiales del país, no distingue entre espontáneos o provocados (termino que resisto) representando sólo una fracción del total anual.

El aborto MATA por  3 CAUSAS médicas: la infección, la hemorragia o las lesiones dentro o fuera del útero; resultantes de un aborto realizado en condiciones inseguras: sea en manos inexpertas o sea en condiciones inadecuadas de asepsia. En ESTE PUNTO DE DEBATE, la intervención médica especializada  e institucional,  evitaría sus fatales consecuencias.

Aunque se estaría evitando evidenciar OTRAS TRES poderosas causas de muerte: la consulta tardía, producto de la condena social [y propia] de la clandestinidad y la determinante criminalización hacia la mujer que han [hemos] ejercido desde siempre, los servicios de atención de la salud, en toda América Latina.

Si los medios de comunicación configuran un mundo, abren sus ventanas a la

la diversidad de culturas, como también lo hacen a la imagen que muestran de las mujeres. El aborto y las muertes por esta causa, se han encontrado en agenda de los medios de comunicación solo y cuando, su despenalización se encuentra en tratamiento legislativo o sus condiciones de no punibilidad se constituyen  en interés por un “caso testigo” de utilidad mediática.

Mantengamos la exigencia. Los legisladores deben sentar posición.

 

*Médica sanitarista. Docente universitaria