TODO JUEGO ES POLÍTICO

0
412

Por Nicolás Mellino (*)

El modelo político y económico neoliberal generó lamentables niveles de desempleo, pobreza, desigualdad y endeudamiento, tiene su correlato en el deporte y aquella Secretaría del Ministerio de Desarrollo Social que ejecutaba políticas orientadas al desarrollo del deporte de 2004 hasta 2015, ha quedado en el olvido. El Gobierno de Mauricio Macri demostró otras prioridades, y esa secretaría se convirtió en una Agencia de Promoción del Deporte que abandonó su perspectiva de crecimiento para transformarse en un edificio público que prioriza llevar a cabo negociados inmobiliarios, como ocurrió con la venta de los terrenos del Tiro Federal e intenta hacer lo mismo con las instalaciones deportivas del CeNARD y el Instituto Romero Brest. Eliminó programas sociales por considerarlos un gasto en lugar de una inversión y le quitó la autonomía al ENARD perjudicando al alto rendimiento deportivo argentino. 

Esta desinversión fue imitada por la Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, quién le quitó el rango histórico de secretaría, convirtiéndola en una subsecretaría con un escaso presupuesto (hasta 5 veces menor que el de otras provincias como San Juan, Entre Ríos o Misiones) y abandonó programas sociales, donde aproximadamente el 90% del mismo es destinado a los Juegos Bonaerenses.

En lo local, mientras municipios como Almirante Brown, Avellaneda, Fcio Varela o Berazategui, en medio de la crisis, apostaron al desarrollo del deporte como herramienta de inclusión y transformación social, aquí se acompañaron las políticas de achique, eliminando ligas deportivas masivas, actividades descentralizadas en todo el distrito, total falta de acompañamiento a clubes y entidades, en su mayoría asfixiadas por tarifas impagables, falta de políticas equitativas en cuestiones de género y un Gimnasio Multideportivo (construido por la anterior gestión) librado al abandono absoluto.

Éste gobierno contrasta con los ideales peronistas de inclusión y justicia social. Muestra de esto es la creación, en el año 1948, bajo el Gobierno de Juan Domingo Perón, de los Juegos Infantiles Evita como herramienta de inclusión y promoción social. Con el golpe de estado de 1955, se cancela la realización de los juegos hasta el año 1973, donde se pasan a denominarse Juegos Nacionales Evita y luego son proscriptos nuevamente en 1976. 

En el año 1991, se crearon en la Provincia de Buenos Aires los Torneos Juveniles Bonaerenses, donde los 135 municipios participan en una etapa distrital, para luego pasar a una regional y luego así, acceder a la final provincial que se disputa en la ciudad de Mar del Plata. 

Es recién en el año 2003, bajo un decreto del presidente Néstor Kirchner, que renacen los Juegos Evita y el deporte se convierte en una política de estado. Con la llegado de Cristina Fernández al Gobierno, en el año 2008 los Juegos se convierten en un derecho establecido por Ley incluyendo además, la categoría Adultos/as Mayores. En el año 2009 se crea, mediante la Ley 26.573, el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo, marcando un antes y un después para el deporte argentino.

Con el impulso y creación de nuevas universidades, en el año 2014 se crean los Juegos Universitarios Argentinos. Estos, llegaron para ocupar un espacio vacío, inexistente hasta el momento, permitiendo que todo estudiante del sistema superior de Argentina, acceda a una competencia federal y de calidad fomentando lazos educativos, deportivos y culturales.

Hoy, luego de 4 años de odio, donde quedó demostrado que no fue magia y que cada medida tomada en favor del pueblo ha sido en gobiernos peronistas, es tiempo de volver a soñar, de considerar a la amplitud de derechos como una necesidad, de volver a proyectar, de ponderar lo colectivo por sobre lo individual, hoy es tiempo de volver. Es ahora y es con todes!

(*) Coordinador del Programa de Integración Social y Desarrollo Deportivo (UNQ); Presidente del Comité Técnico del Deporte Universitario Argentino (CIN); Comisión de Deportes Instituto Patria; Ideal Quilmes.