“Si algún empresario (díscolo) se le ocurriera invertir en industria liviana o pesada seguramente lo haría en Partidos como San Martin, Berazategui, Moreno o Almirante Brown”

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Por Diego Vega – Licenciado en Cs. Sociales. – Integrante Ideal Quilmes

Es un tiempo de crisis con una inflación superior al 40% anual con baja en consumo, incremento de costo vía tipo de cambio y tarifas, sumado a una capacidad ociosa de la industria por arriba del 42% (INDEC Abril 2019). En éste escenario, los empresarios industriales se encuentran en una situación crítica. Entonces ¿Cómo es posible romper la inercia y poner funcionamiento el aparato productivo nacional y el quilmeño en particular?

Si bien los males de este sector tienen como raíz las políticas macroeconómicas delineadas a nivel nacional, los gobiernos locales pueden tomar cartas en el asunto, de hecho lo hacen. Una de las ventajas que tienen los municipios respecto de Nación y Provincia es el nivel de proximidad, la capacidad de conocer las características, las problemáticas y las ventajas que tienen las empresas instaladas en su territorio. Esto permite impulsar políticas focalizadas en determinados rubros con la especificidad que cada uno requiere, porque no es lo mismo lo que demanda el pesquero de Mar Del Plata con lo que puede demandar el zapatero PyME de Quilmes. En síntesis, para promover la Industria de un municipio hay que conocerla y a partir  de eso, se deben activar políticas públicas que vayan en esa dirección.

En nuestra Ciudad, la Secretaría de Desarrollo Económico quilmeña tiene aceitados todos los circuitos necesarios para recaudar de manera eficiente y efectiva, pero lamentablemente ese mismo empeño no es puesto en pos de promover la inversión, fomentar el asociativismo empresario, dar a conocer las herramientas nacionales y provinciales que están a disposición de las empresas en crisis, alentar la permanencia o expansión de industrias en la ciudad vía creación de parques industriales.

Por ello es imperioso que el Municipio identifique las empresas de mayor tamaño, a juzgar por la cantidad de empleados, y comience con ellas un camino nutrido de propuestas que busquen, no solo cuidar al empresario PyME, sino también las fuentes de trabajo.

Hoy si algún empresario (díscolo) se le ocurriera invertir en industria liviana o pesada seguramente lo haría en Partidos como San Martin, Berazategui, Moreno, Almirante Brown entre los más sobre salientes en materia industrial, no solo porque tienen dinamizado el sistema para el establecimiento industrial sino porque acompañan. ¿Como? Con políticas que alienten “el compre local”, fijando beneficios a empresas radicadas en su ciudad, promoviendo las exportaciones, entre otras. En fin, existen diversas herramientas pertinentes que se aplican en Municipios del Gran Buenos Aires.

Necesitamos un Gobierno Local que abandone el letargo y comience más temprano que tarde un camino de promoción de políticas industriales e interpele al empresariado de manera positiva, generando y comunicando las propuestas. Para la planificación industrial es base pensar a Quilmes como una ciudad en la que se cree trabajo y se potencien industrias, conectarla de este a oeste y no solo de sur a norte como si el destino obligado fuese ir a trabajar a Capital Federal como una ciudad de paso o dormitorio. Los ciudadanos de Quilmes necesitan una dirigencia política competitiva, pro activa que estreche relaciones con el aparato productivo local como política de Estado.