Según una encuesta publicada por Federico González & Asociados indica que un 43, 6% se inclina por el binomio Fernández, mientras que la boleta oficialista suma 29,3%. Para la gobernación, Kiciloff le gana a Vidal por 6 puntos.
Las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto próximo definirán las tendencias que consolidarán en octubre a las futuras autoridades gubernamentales a nivel nacional, provincial y municipal. Son nueve frentes electorales que competirán para asumir la responsabilidad de administrar la “cosa” pública. Juntos por el Cambio será la lista del gobierno, mientras que el frente TODOS llevará a Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. A su vez, Consenso Federal tendrá a Roberto Lavagna y al gobernador de Salta, Juan M. Urtubey. El economista José Luis Espert estará acompañado por Luis Rosales y están anotados como “Unite”, mientras que “NOS” lo encabeza Juan Gómez Centurión y Cynthia Hotton.
La izquierda va dividida y el Frente de Izquierda contará con Nicolás del Caño y Romina del Pla. El armado no logró unificarse con el MAS, donde Manuela Castañeira y Eduardo Mulhall competirán por los votos “zurdos”. Por último, el Frente Patriota lleva al neonazi, Alejandro Biondini y Enrique Venturino, mientras que el PAN cierra la oferta electoral con José A. Romero Feris y Guillermo Sueldo.
La encuesta realizada entre el 25 y el 28 de junio, combino 1000 casos entre presenciales y telefónicos y los resultados obtenidos determinaron que un 43,6% se inclinó por la dupla Fernández- Fernández, mientras que Macri-Pichetto fue elegido por el 29,3%. En las intenciones presidencialistas, Consenso Federal sumó 4,9% y UNITE un 4,8%. Por otra parte el Frente de Izquierda alcanzó 4,2% y muy atrás quedó el MAS con 0,2%. Las demás opciones no sumaron intención de voto.
Respecto a la gobernación provincial, María Eugenia Vidal (35%) conserva mejor intención de voto que Macri pero es superada por el economista Axel Kiciloff (41,1%) por seis puntos. En ese sentido, Cambiemos puede perder la gobernación, pese a que la gobernadora no está expuesta como el presidente. Sin embargo, el ajuste en provincia y nación son equilibrados, ya que se abandonaron programas de asistencia médica y los hospitales sufren las consecuencias de las medidas económicas. En tanto que la educación sigue con problemas de infraestructura y salariales, que perjudicaron el funcionamiento del sistema educativo.