Martiniano se quiere despegar de Macri y hace campaña con Vidal

0
384

En los últimos días aparecieron carteles del intendente, Martiniano Molina, junto a la gobernadora María Eugenia Vidal. En el gobierno local es la estrategia que estiman, los conducirá a la reelección.

A una semana de la veda electoral, estamos en la recta final que definirá quienes representarán a las distintas fuerzas políticas que competirán en octubre para renovar autoridades gubernamentales, tanto a nivel nacional, provincial y municipal. En Quilmes, aspiran a retener el gobierno, ya que junto con Lanús,  son los únicos dos distritos que están en poder  del macrismo. Esta situación es delicada porque la tercera sección electoral es un bastión histórico del peronismo. De hecho, la adhesión a la figura de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner es alta. Y pasa lo contrario con la imagen el presidente, Mauricio Macri.

En el entorno de Molina dicen que estar en la boleta de Macri y Vidal no afecta el resultado electoral, y que la imagen del presidente no es tan mala como algunos dicen. Sin embargo, en los carteles de campaña de Martiniano Molina, llama la atención que no se vio ninguna con los tres candidatos: Macri, Vidal y el intendente. Por el contrario, la imagen que circuló es la de  la gobernadora y Martiniano Molina. Esta jugada puede tener sus consecuencias, porque el jefe de Juntos por el Cambio (Macri) no está conforme con la definición de correrlo de la campaña. Recordemos que el municipio recibe cerca del 30% de sus ingresos provenientes del gobierno nacional. La fractura ya se percibió a principios de año cuando especulaban que la gobernadora desdoblara la elección provincial, situación que fue rechazada por el propio Mauricio Macri.

A una semana de la definición primaria, en el gobierno también son conscientes que la situación económica es compleja y que es probable que se pierda el municipio, porque en todas las encuestas dan al Frente Todos muy por encima del macrismo y ser parte de una fórmula que perjudicó a una inmensa mayoría de la población con las políticas implementadas, puede tener un costo que contraste con el beneficio recibido en obras publicas que tuvo Martiniano Molina. Situación que favoreció su gestión porque recibió el doble o triple de dinero que municipios vecinos y gobernados por la fuerza opositora. Esta situación no es nueva, la de cuidar a los propios y retacear recursos a los gobiernos opositores.

El “viento de cola” que tiene Martiniano  Molina es que la poca información sobre cómo funciona un gobierno  municipal hace pensar que su gestión concretó “más de 300 obras”, slogan de campaña que eligieron para buscar la reelección. Lo cierto es que el Estado Municipal se redujo en estos tres años de gobierno, porque los presupuestos anuales y su comparación con el aumento de la inflación así lo demuestran. Por ejemplo, en diciembre el presupuesto enviado por el gobierno municipal fue de 8500 millones de pesos, mientras que el de 2018 estuvo en los 8000 millones. En ese sentido, si la inflación anual supera el 25% (situación probable) el municipio se achicará un 20% de su capacidad de bridar servicios, ya que el aumento presupuestario es cercano al 5%. Esta tendencia fue la misma en años anteriores desde 2016 con menor intensidad.