COLOR LOCAL

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El pasado sábado y con una organización que supera su despliegue cada año, se llevó a delante la 4ta Marcha del Orgullo diverso y disidente en nuestra ciudad. La fiesta de la diversidad quilmeña es cada vez más grande.

Por Magalí Milazzo

La plaza San Martín se llenó de música, pañuelos, banderas, glitter y consignas de lucha. Amigxs por la diversidad es una ONG que activa en el distrito desde 2012. Hace 4 años que en la casa de Alejandro Benitez Froy, durante una reunión de Género de la agrupación Violeta de SUTEBA a la que pertenece, surgió la propuesta de replicar la Marcha Nacional del Orgullo a nivel local. “Durante 5 años participamos de la Comisión Organizadora Nacional pero cada territorio tiene  sus problemáticas. No es lo mismo ser puto en Solano que en Capital. Hay una parte de nuestras demandas que no aparece en la marcha nacional porque es en el conurbano donde más sufrimos las consecuencias del neoliberalismo”, expresa Alejandro.

Apenas pasadas las 16, en el escenario montado en el centro de la plaza, comenzó la previa en la que se sucedieron una serie de discursos y números artísticos. A su turno, los discursos trataron las consignas de siempre y reforzaron las que este año lxs convocan: atención médica integral con perspectiva disidente, aborto legal, seguro y gratuito para cuerpos gestantes, implementación plena de la Educación Sexual Integral en las escuelas, distribución gratuita de preservativos así como el proyecto de creación de uno para cuerpos con vulva, la denuncia del faltante de medicamentos para personas que viven con VIH  y la exigencia del cese al hostigamiento policial y judicial. También hubo relatos de experiencias y la presentación de la iniciativa “Cristianxs Inclusivxs”.

Laura Leonardi, candidata a consejera escolar por el Frente de Todxs ofreció un encendido discurso en el que destacó que ““en Quilmes tenemos la posibilidad de votar una intendenta mujer, solidaria con las disidencias” en alusión a Mayra Mendoza, quien también se hizo presente. El electropop disidente de Max Tejera y los lepidópteros hizo bailar y cantar a todxs antes de arrancar la marcha a las 18.

Banderas de distintos frentes representantes de organizaciones sociales, políticas y barriales se desplegaron para iniciar junto a lxs vecinxs un recorrido por las principales calles del centro en el que predominaron los cantos contra el gobierno nacional. La marcha se convirtió en un colorido desfile de libertades disidentes. Luego volvieron a la plaza para su cierre con más música. El sur diverso existe y como hemos visto, resiste con firmeza y alegría.