El intendente de Quilmes, Martiniano Molina, aseguró a días de entregar su mandato que durante su gestión se realizaron más obras públicas que en los últimas tres décadas, aunque algunos datos sobre el tema lo desmienten.
Por Pablo Lapuente
“Hicimos más obras públicas que en los últimos 30 años”, afirmó Martiniano sin ruborizarse ante una multitud en el Teatro Municipal de Quilmes. Es decir más emprendimientos que todos estos antecesores juntos: Eduardo Camaño (1987-1991), Aníbal Fernández (1991-1995), Federico Scarabino (1995-1999), Fernando Geronés (1999-2003), Sergio Villordo (2003-2007) y Francisco Gutiérrez (2007-2015).
Un repaso rápido sobre algunas de las obras más emblemáticas de la ciudad lo refutan. Es que en materia de viviendas se entregaron hogares en los barrios San Ignacio, Santo Domingo, Novak, La Odisea, La Matera y en Veteranos de Malvinas I y II durante el Gobierno 2003-2007, mientras que en el periodo 2007-2015 se sumaron 1330 casas, con las primeras entregas en Memoria Verdad y Justicia y Los Eucaliptus, mientras que en la actualidad se paralizaron por completo.
En el área de tránsito, el actual intendente macrista inauguró 3 bajo vías, uno de ellos gracias al inicio de obra de la gestión Gutiérrez, que incluía una caja de Aporte del Tesoro Nacional de $23.000.000. Pero existen cuatro más. Dos fueron iniciados por Villordo, un tercero por Gutiérrez, y dos restantes por gestiones más antiguas fueras del periodo de este análisis.
También se puede observar como en el Gobierno 2003-2007 se inauguraron las bajadas de autopista de Quilmes y Bernal, mientras que en las dos gestiones siguientes se llevó el asfalto de 66% al 85%.
Además, gracias al Gobierno de Cristina Fernández se pasó del 55% al 97% la extensión de agua potable en todo el distrito, y del 47% al 85% la de cloacas, lo significa que se realizaron 117 km de cañerías y 331 mil metros de cañerías.
Con tan sólo sumar la construcción del Teatro Municipal, el centro de Producción Audiovisual Leonardo Favio, el Cultural Amaicha y el Microestadio Néstor Kirchner, poco margen le queda al dirigente de Juntos por el Cambio para mantener la mentira.