El Instituto de Estudio y Administración Local (IDEAL) elaboró un informe sobre Educación Sexual Integral (ESI) en nuestra ciudad. Entre los meses de mayo y octubre los profesionales realizaron una serie de encuestas que arrojaron resultados relevantes para un abordaje del tema que permita mejores resultados futuros.
Por Magali Milazzo
Fundados en las premisas de salud en sentido amplio (la salud no es solo la ausencia de enfermedad sino el desarrollo integral bio-psíquico y social de las personas), la necesidad del pleno ejercicio de derechos y la consideración del estudiante como portador de saberes, los profesionales del instituto realizaron 1533 encuestas a ciudadanxs quilmeñxs mayores de 12 años explorando sus conocimientos sobre la ESI y sus demandas.
Un 97% de los encuestados encontró necesaria la implementación de la Ley, legitimando no solo al Estado y la norma, sino al docente en su nuevo rol de educador en el campo de la sexualidad. Este dato representa un hallazgo relevante considerando las resistencias que muchas veces son magnificadas frente a la obligatoriedad del cumplimiento de la ley.
Otro dato de importancia señala la que aún persisten ideas biologicistas que reducen la sexualidad a su función reproductiva y la ESI refiere a conocimientos sobre métodos anticonceptivos, lo que hace evidente la necesidad de trabajar más profundamente lo que atañe a sentimientos y valores, es decir su integralidad.
Finalmente se hallaron fuertes deficiencias en el vínculo entre la familia y la escuela. El canal de información más importante es la escuela pero lo que se trabaja allí difícilmente llega a ser dialogado en el ámbito familiar y eso termina siendo un bloqueo al acceso, por ejemplo, de métodos anticonceptivos. Este dato sugiere la necesidad de fortalecer esa relación y proponer espacios de participación y formación de las familias y el conjunto de la comunidad.
El informe, que puede leerse completo en la página web de IDEAL Quilmes y afirma para finalizar que “es importante que la ESI sea abordada por la escuela con el mayor grado de consenso posible, promoviendo asociaciones significativas entre la escuela, las familias y la comunidad en general. Esto es una obligación, y también una oportunidad para abordar integralmente la formación de los niños, niñas y adolescentes”.