ESCUELAS: EL PROBLEMA DE FONDO

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Esta semana los gremios docentes continuaron con las medidas de fuerza durante el lunes, martes y miércoles en el marco de la demanda de un aumento salarial del 35%, tras la oferta oficial del 19% más una compensación de $ 500 por única vez. También participaron del paro nacional de CTERA realizado este miércoles y jueves, y ratificaron una marcha federal, con delegaciones gremiales que llegarán desde siete provincias, para el miércoles 22 de marzo.

La jefa de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, señaló que el paro es «ante la falta de convocatoria para iniciar la negociación».

“Es grave que desde enero estemos planteando la necesidad de una convocatoria a paritaria nacional docente y no hayamos tenido ningún tipo de respuesta”, afirmó Sonia Alesso, secretaria general de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) en declaraciones radiales.

La secretaria gremial de Suteba, María Laura Torre dijo a La Red que el conflicto «es un tema de dinero, si no hay propuesta con dinero, es muy difícil. Va a aparecer, pero si no aparece, seguiremos en un conflicto muy profundo. Pero estoy convencida de que va a aparecer porque esa plata está«.

La afirmación de que “la provincia de Buenos Aires está fundida” por parte de María Eugenia Vidal reforzó el argumento de los gremios sobre la necesidad de convocar a la paritaria nacional docente. “La gobernadora está reconociendo que no puede afrontar la paritaria. Entonces la Nación tiene que auxiliar al Estado provincial”, afirmó Roberto Baradel, titular de Suteba. En el mismo sentido se pronunció Miguel Díaz, de Udocba: “Si la provincia está fundida, la nación debe auxiliarla. No creo que el presidente Macri deje sola a la gobernadora si le pide ayuda”, evaluó.

En este marco, Quilmes es una de las ciudades que padecen el tire y afloje, con más de 300 escuelas públicas. El eje de discusión en el reclamo de los gremios y desde sectores de la oposición se encuentra en la ejecución del Fondo de Financiamiento Educativo por parte de la Municipalidad. Los gremios docentes locales, desde mediados de 2016, señalan que el gobierno de Martiniano Molina ha subejecutado este Fondo que hace al financiamiento de las escuelas públicas del distrito y exigen que se transparente la información.

Según lo informado por el Municipio el mes pasado, entre jardines y escuelas, son 28 los establecimientos educativos donde se hicieron refacciones durante 2016 y principios de 2017. Estos trabajos incluyen reparación de cielorrasos, pintura, reparación sanitaria, eléctrica, de gas, colocación de desagües, rehabilitación de aulas, reemplazo de zinguerías y aulas nuevas, entre otras obras. Sin embargo, el monto de esta inversión no fue detallado.

En 2016 el concejal de Juntos Por Quilmes (FpV), Angel García, presentó más de 25 pedidos de informes a través de minutas de comunicaciones solicitando que el Poder Ejecutivo informe el estado de situación edilicia de las escuelas ante la gravedad en diferentes instituciones. «Además solicitamos que el Gobierno municipal atendiera esta deficiencia a partir del Fondo Educativo, que el año pasado fue de cerca de 110 millones de pesos», explicó García. «Nos contestaron que algunas escuelas habían sido derivadas a la Unidad Educativa de Gestión Distrital (UEGD) – organismo donde participan tanto el Poder Ejecutivo como el Concejo Escolar y la Jefatura de Inspección-«. Sin embargo, al finalizar el ciclo lectivo, «en general no se habían hecho esas refacciones», aseguró el concejal.

Por otra parte, García apuntó contra el Concejo Escolar y el Ejecutivo: «vemos que tiene una actitud similar al Ejecutivo. El Intendente dijo que se han reparado escuelas durante el verano pero no detalla qué empresa estuvo a cargo de la reparación ni por qué monto. Sabemos que en 2016 se entregaron subsidios a 6 o 7 escuelas, pero no sabemos la metodología que aplicaron. Podremos saberlo en el mes de abril cuando el Ejecutivo tenga que rendir cuentas del ejercicio pasado y ahí sabremos cuanta plata se destinó y a qué escuela».

Por su parte, el presidente del Consejo Escolar de Quilmes, Danilo D’Angelo, tiene una mirada diferente ante la problemática. En diálogo con CPB Noticias afirmó que está «trabajando muy duro» en la problemática de infraestructura. Reconoce que en el Consejo están «muy complicados con los recursos» pero asegura que se ha «mejorado con la ayuda del municipio con el tema del Fondo Educativo y la DPI (Dirección Provincial de Infraestructura)».

Aunque no tenga estadísticas sobre el estado de las escuelas de Quilmes al inicio de la gestión de Molina, ni de las refacciones realizadas a la fecha, D´Angelo señala que «cuando asumimos había muchas escuelas con deficiencias» y que «hay muchas cosas que se han mejorado». Además, aseguró que «hay muy pocas escuelas con problemáticas graves», y que «se están solucionando día a día. Según los inspectores de la DPI, no hay ninguna escuela con riesgo de inicio hoy».

FALLA DE SISTEMA

En Quilmes hay un porcentaje importante de escuelas que aún no está en condiciones totales con respecto a lo que serian las situaciones de infraestructura escolar.  «No se ha desarrollado la obra completa para garantizar las clases, incluso muchas cuestiones quedaron pendientes, iniciadas, sin iniciar, o por la mitad», señala Fabiana Pérez Valdez, docente y delegada paritaria de la Agrupación «Celeste» del SUTEBA de Quilmes. El problema de fondo es que, además de la falta de inversión, el mismo sistema falla: «Durante el temporal anterior al inicio de clases, el jardín 950 de Solano quedó prácticamente inundado. Esos arreglos aún no fueron relevados o no se pusieron en práctica con el agravante de que cuando se quiso iniciar el expediente reiterando la solicitud del arreglo de las filtraciones en la DPI, no había nadie para recepcionarlo, por lo cual la Jefatura distrital también se negó a recibir la nota».

Otro caso reciente: durante el desmalezamiento que realizó la Municipalidad de Quilmes preparando el inicio de clases el 6 de marzo, uno de los trabajadores de la delegación municipal cayó a un pozo ciego en la Escuela 80. «Fue una desgracia con suerte porque era una persona adulta y porque los niños aún no habían concurrido al jardín», aseguró Perez Valdéz. El problema es que el pozo no estaba detectado. «Esa denuncia hace años que la venimos haciendo».

TANQUES SIN INSTALAR

En 2016, tras varios reclamos por parte de la Agrupación Celeste del SUTEBA al Consejo Escolar, al Municipio y a la UEGD, se hizo una compra importante de tanques de agua para cambiarlos por los antiguos, de fibrocemento, y así cumplir con la Ley de Seguridad e Higiene. Sin embargo, no fueron instalados. «Ahora vamos por la lucha que va a implicar que los tanques sean colocados para que todas las escuelas dejen de tener los tanques sucios, sin tapa o de fibrocemento».

SIN PERSONAL

A la fecha aún no se realizó el nombramiento del personal auxiliar que se necesita para garantizar el funcionamiento de los comedores escolares y la limpieza de las aulas. Tampoco están definidos los docentes que faltan para que se garanticen los días de clases desde el inicio. «Hay 90 cursos en secundaria que se van a cerrar y, en el caso de que se abran cursos nuevos, no llegaría ni a la mitad de los que se cerraron. Así que exigimos una pronta reubicación de todos los que tenían los puestos de trabajo y que se garantice la estabilidad laboral de todo el personal», señaló la delegada paritaria del SUTEBA.

SIN MANTENIMIENTO

Uno de los reclamos que más se oye entre los docentes y directivos es la falta de mobiliario. «Aunque se compró mobiliario en gran parte para iniciar el ciclo de 2016, para el de 2017 no llegó el mobiliario suficiente», aseguró Pérez Valdéz. Faltan mesas y sillas para las aulas- que en muchos casos fueron reciclados por las escuelas técnicas como un gesto solidario- mesadas, y arreglos como cambios de canillas, limpiezas de cañerías, heladeras (que sufrieron imperfectos por cortes de luz), entre otros. «Entendemos que esos arreglos le corresponden al Consejo Escolar», señala Pérez Valdez. Es que hasta el 2015 esas situaciones de mantenimiento se resolvían con el Fondo de Escuelas (el 40% del presupuesto destinado a arreglos menores), pero la Provincia no lo envía desde hace un año.

PRESUPUESTO

«Queremos estar en aulas en condiciones. La desinversión de los últimos años con respecto a infraestructura escolar ha sido muy grande.» Desde SUTEBA sostienen que «el presupuesto está» y que «no estamos anoticiados del funcionamiento que tienen las obras que dependen de la DPI». Además aseguran que «no se reactualizaron las obras que dependían  antiguamente de Nación ejecutadas por la unidad ejecutora provincial para los distritos del conurbano bonaerense y la Provincia». Por eso, una de las principales banderas del reclamo docente es que se aumente el presupuesto educativo y que se inyecte dinero en infraestructura escolar.

 

OBRAS A MEDIAS

 

Entre las obras que resaltan que habían comenzado y quedaron sin terminar se encuentran: el jardín 942 de Don Bosco tenía asignado el terreno y la obra pero quedó paralizada y vuelto a licitar; para el edificio del Normal de Quilmes, hoy Media 20, también reclaman la reparación, construcción y finalización; para la Media 11 de San Francisco Solano, reclaman las obras eléctricas; en la Escuela 46 no se finalizaron las obras que se habían comenzado; en la Escuela Media 8 no se resolvieron los graves problemas de infraestructura. «Necesitamos que se terminen las aulas de aquellas escuelas que pidieron acrecentar aulas; las baterías de baños; el arreglo con respecto a las cuestiones de seguridad; las instalaciones de cámaras perimetrales fuera del edificio escolar.»

En 2016 ingresaron a robar 6 veces a la Escuela Técnica 6. «Tuvimos que pasar más de 6 robos en 1 año para que el municipio y el Consejo Escolar pusieran cámaras en las esquinas o un monitoreo para ver por dónde entraban los ladrones», aseguran.

MEJOR NO HABLAR

CPB Noticias recorrió algunas escuelas del oeste del distrito para poder hablar con directoras de los establecimientos educativos, pero nos encontramos con una misma situación: «Dejame preguntar para evitar problemas», fue la respuesta que encontramos en la mayoría de las escuelas visitadas, a la hora de intentar conocer la problemática de infraestructura en que se encuentran las escuelas del distrito. Esto resulta un dato que llama la atención en tiempos de democracia. Las entrevistas realizadas no serán publicadas por protección a represalias, por parte de la dirección de inspección de escuelas.