Estas prácticas no son extrañas para el empresario Macri y su entorno. En el mundillo político no fue sorpresa esa maniobra fuera de la ley de la Agencia Federal de Inteligencia macrista. Sin embargo, se conocen nuevos nombres de propios, extraños (hasta los familiares del ARA San Juan son víctimas) que fueron espiados.
Según un informe de más de 300 páginas del Juzgado Federal de Dolores, a cargo del Dr. Ramos Padilla, durante la administración Macri se realizaron escuchas ilegales a dirigentes (inclusive de la alianza Juntos por el Cambio), periodistas, organizaciones políticas y sociales a cargo de la AFI, que dirigía un hombre de confianza de Macri como Gustavo Arribas.
Entre las espiadas ilegalmente se encuentra, como novedad, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. El informe da cuenta que la actual jefa comunal de Quilmes como otros dirigentes políticos (Martín Sabatella, Verónica Magario, Jorge Ferraresi, entre otros de los más de 500 espiados) aparecen en las bases del trabajo ilegal de Inteligencia a cargo de la AFI del gobierno anterior.
Seguramente habrá nuevos capítulos en esta oscura historia, que se ha denominado la causa «D’Alessio, Marcelo Sebastián y otro/s Asociación ilícita y otro».