Falleció a los 81 años el Padre Luis Farinello, quien será recordado porque su legado permanecerá vigente, fruto del compromiso y la coherencia de su prédica.
El pasado 2 de junio dejó su legado para siempre en la tierra y en la ciudad, el padre Luis Farinello, quien falleció luego de sufrir una crisis cardio respiratoria. Fue apodado el cura obrero, a fuerza de levantar paredes mientras ejercía el sacerdocio porque consideraba que él mismo debía generar los recursos para su sustento, sin requerir del erario de la Iglesia Católica. Tal es así que trabajó como albañil durante siete años.
Luis Farinello nació en Villa Dominico un 8 de febrero de 1937. Hijo de inmigrantes italianos, su padre verdulero, su madre, sirvienta. Desde chico ayudó a su padre en la venta de verduras. Se inició en la religión en su adolescencia, ya que era un poco tartamudo y le daba vergüenza hablar. Una vez escuchó que en la iglesia se estudiaba en silencio y eso lo empujó a la religión. Pronto se identificó con San Francisco de Asís y predicó su ejemplo.
El 8 de agosto de 1964 Monseñor Eduardo Pironio lo designó párroco de Nuestra Señora de Luján, en la conocida “Iglesia caracol”, en la esquina de Primera Junta y Lavalle, cercana al centro de la ciudad. Durante los setenta adhirió al movimiento de sacerdotes tercer mundistas junto al obispo Jorge Novak y Enrique Angelelli, entre otros. En los años de plomo participo en la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos.
“El hombre se interroga buscando un sentido. Y eso es como la utopía, buscar un sentido profundo que te movilice en esa dirección. Puede ser el arte, la poesía, la política, puede ser el amor al prójimo, puede ser Dios”, explicaba Luis, durante un reportaje.
En los años 90 comenzó a tomar protagonismo porque se involucró con las familias más castigadas por un sistema económico y político que excluía a las mayorías y castigaba a los más débiles. Tal es así que creó la Fundación Farinello, donde alberga a cientos de pibas y pibes del distrito, dándoles contención, alimentación, educación, recreación y oficios. En la actualidad la Fundación se encuentra en Echeverría 441, en Ezpeleta.
En 1994 fundó la radio comunitaria FM Compartiendo, donde se divulgaban las situaciones sociales que el neoliberalismo comenzaba a sembrar en el suelo nacional. “Saben lo que es ser pobre, saben lo que es tener hambre, saben lo que es salir a buscar trabajo y no encontrarlo, que no hay plata ni para el colectivo y caminar y caminar y caminar”, dijo en su visita el programa de Mariano Grondona, allá por 1996. Luis siempre estuvo comprometido con la justicia social y demostró su solidaridad en cada momento. Así fue durante la marcha que trabajadorxs del Hospital Oller reclamaban por los despidos del gobierno municipal, en febrero pasado.
Su compromiso social lo llevó a crear un partido político: El Polo Social, donde fue candidato a senador por la provincia. Se mostró a favor de la AUH, del matrimonio igualitario y era crítico del celibato. “El celibato tiene que ser revisado. Tiene que ser optativo”, dijo.
También tuvo su programa televisivo en la TV Pública llamado “El Kairos”, donde transmitía sus mensajes. Se dijo peronista y estuvo dos veces con Perón. Decía que era un gran líder de masas pero que Eva era el corazón del movimiento. “Una vez que murió Eva el peronismo perdió un poco su corazón”, dijo. Durante un documental que puede encontrarse en la web, expresó que Jesús fue “el loco más lindo de la historia”.