Nocturnidad: «Lo peor es la discrecionalidad del funcionamiento que habilita a algunos bares estar abiertos por fuera de la ley»

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Así lo entiende Ángel García (UC) quien afirma que hay locales que no se ajustan a la norma y no son controlados, como es el caso de Buró.

Desde el bloque de Unidad Ciudadana entienden que se debe adecuar la norma a las pautas culturales  respecto a las actividades recreativas nocturnas que se realizan en la ciudad. Según indica la ordenanza, entre otras cuestiones, el límite horario que propone es a las 2 de la mañana para el cierre del ingreso a los boliches. El concejal y presidente del bloque, Ángel García entiende que “en 2016 se realizaron modificaciones donde se restringieron los horarios en contraposición a la ley provincial 14.050 y esa reducción no se controla. Ese es el primer problema que tenemos pero lo peor es la discrecionalidad del funcionamiento que habilita a algunos bares estar abiertos por fuera de la ley”.

 La ordenanza 12553/16 indica que los locales bailables abrirán las puertas para la admisión hasta las 2.00 y cerrarán a las 5.30. También prohíbe la venta de bebidas alcohólicas después de las 4.30 de la madrugada. Según García “hay lugares que cierran porque cumplen con la normativa y hay otros que permanecen abiertos porque no le hacen caso (a la norma) u otros los dejan”. Cabe destacar que la ordenanza regula la actividad de bares, café concert, resto-bares con manifestaciones artísticas, pooles, billares, cetros culturales, clubes sociales, centros de jubilados y centros de estudiantes junto a los boliches bailables.

Ángel García – Unidad Ciudadana

Otra de las cuestiones es el permiso que tienen en términos de cronograma. En la actualidad sólo se pueden realizar bailes los viernes y sábados pero en la práctica acontece otra cosa. “”La realidad nos marca que se hacen los lunes, miércoles, jueves y domingo. Todavía no detectamos ninguno los martes”, indica el concejal. “Se hacen con la autorización de alguien desde una violación clara y sistemática de la ordenanza”, afirma García y agrega que “hay alguien en el gobierno que permite que algunos boliches abran miércoles, jueves, domingo y lunes y hay alguien que a otros boliches se lo prohíbe”.

Desde el bloque indican que durante estos dos años propusieron instancias de modificación al oficialismo para contemplar esta situación pero no se obtuvieron respuestas. Por otra parte, García entiende que “hacer de Quilmes un lugar mucho más restrictivo implica, por un lado, entender a los jóvenes que salen y no tienen dónde ir pero también  los comerciantes que están en desigualdad con otros lugares de distritos vecinos”. En ese sentido, tanto para las personas que salen como para los comerciantes locales, se genera una disminución de la oferta recreativa.

Y aquí hay dos aspectos a tener en cuenta, uno es que la discrecionalidad que se aplica en los operativos cercena las posibilidades comerciales de quienes se ajustan a la ordenanza pero, paradójicamente, favorece a quienes no la cumplen.